IU-Verdes Lorca pide alternativas a la prohibición de quemas de podas para los pequeños agricultores

Gloria Martín propone soluciones al Ayuntamiento para evitar que los restos vegetales terminen acumulándose en ramblas, parcelas abandonadas o incluso en montes, con el consiguiente riesgo de incendios forestales en época estival, tal y como ha podido comprobar su formación política

La concejala de Izquierda Unida-Verdes, Gloria Martín, ha mostrado su preocupación por la falta de alternativas de que disponen los pequeños agricultores respecto a la quema de podas. Martín explicó que desde el pasado enero, por orden de la Consejería de Agricultura del Gobierno regional se prohibió la quema de restos agrícolas, salvo que se acredite la existencia de algún tipo de plaga.

La edil de IU recordó que en la Región de Murcia se generan anualmente 650.000 toneladas de residuos leñosos procedentes de la poda y unas 100.000 toneladas de restos herbáceos. Una parte importante de estos residuos eran quemados a cielo abierto, generando problemas de contaminación atmosférica y, sobre todo de salud, en las áreas pobladas más cercanas.

Gloria Martín aseguró que el cambio en la normativa "era necesario" pero que, al mismo tiempo, las administraciones deben favorecer alternativas a la quema de restos vegetales para los pequeños agricultores de la huerta y del secano, como el triturado para su posterior aplicación como enmienda orgánica protectora del suelo o la producción de biomasa, "sin que estas prácticas les resulten económicamente insostenibles".

Al respecto, la concejala de IU-Verdes ha pedido al equipo de Gobierno municipal de PSOE y C's que colabore en la solución a este problema y ponga en marcha un proyecto piloto como el implementado en Murcia donde, mediante un convenio con la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores de la Región de Murcia (ADEA-ASAJA), el Ayuntamiento de esta localidad ha adquirido varias trituradoras portátiles de las que pueden hacer uso, gratuitamente, los pequeños agricultores.

Martín también ha sugerido que, paralelamente, se habiliten contenedores itinerantes para que los interesados depositen en ellos sus restos de podas agrícolas, que serán entregados posteriormente a un gestor autorizado por parte del Ayuntamiento.

Otra de las soluciones, a más largo plazo, sería que el consistorio apostara por la ampliación de la planta de compostaje de LIMUSA, que podría tratar residuo orgánico mezclado con restos de poda, produciendo un compost de alta calidad que pueda ser usado y comercializado como enmienda orgánica o fertilizante. De este modo, se avanzaría, además, en el cumplimiento del objetivo comunitario de reciclaje del 50% de los residuos municipales.

Gloria Martín ha alertado de que, si no se ofrecen soluciones, los restos de poda se terminarán acumulando en ramblas, parcelas abandonadas o incluso en montes, con el consiguiente riesgo de incendios forestales en época estival, tal y como ha podido comprobar su formación política.

Este sitio web utiliza cookies para facilitar y mejorar la navegación. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso. POLITICA DE COOKIES